Capítulo 3: De ahora en adelante, contraatacaré.

León no sabía qué expresión poner ante la niña que estaba abrazando su pierna y llamándolo papá.

Realmente quería decir: «Cariño, ¿cómo puedes llamar papá a cualquiera así?»

¿Será que te has equivocado?

León se calmó un poco, se agachó de nuevo y, sosteniendo los delgados brazos de Moon, preguntó:

«Pequeña, como acabo de despertar y no sé nada, ¿es posible que me hayas confundido con alguien más?»

Moon sacudió su cabecita, haciendo que el mechón de pelo en su coronilla también se moviera, «No, mamá viene aquí todos los días para ver si has despertado, papá.»

Antes de que León pudiera preguntar algo más, Moon le agarró la mano y comenzó a tirar de él hacia la puerta,

«¡Vamos rápido a buscar a mamá, estará muy feliz de verte despierto!»

¿En serio, cariño?

¿Estás segura de que tu madre se alegrará de verme?

Será un milagro si no me parte la cabeza, y mucho menos alegrarse.

Mientras se quejaba internamente, León aprovechó que Moon se había dado la vuelta para ver la cola de dragón detrás de ella.

Aunque no era tan gruesa y larga como la de Rossweisse , era pequeña y adorable, provocando el impulso de querer acariciarla.

«Eh, espera, espera, Moon.» León volvió a la realidad y rápidamente detuvo a la niña.

Pero pudo sentir claramente que esta cría humana, que parecía tener solo tres o cuatro años, tenía una fuerza sorprendente.

Aunque León acababa de despertar del coma y su cuerpo estaba débil, no debería haber sido tan difícil detener a una niña tan pequeña.

Parece que la sangre de dragón es realmente fuerte, incluso un embarazo accidental puede dominar la genética.

Y pensar que su hija era una pequeña dragona con fuerza sobrenatural… León sintió una inexplicable sensación de tristeza.

El joven matadragones, finalmente se convirtió en el padre del dragón malvado.

«¿Qué pasa, papá?»

Moon lo llamaba papá una y otra vez, haciendo que León se sintiera un poco incómodo.

«Eh… quiero saber, ¿cuánto tiempo estuve en coma?»

Moon parpadeó con sus hermosos ojos grandes, sus pupilas húmedas llenas de confusión sobre matemáticas y calendarios,

«No… no lo sé… pero vengo con mamá a verte todos los días.»

Moon levantó la mano y señaló el reloj en la pared, «A las diez de la mañana, mamá viene a verte a las diez de la mañana, todos los días.»

León giró la cabeza para mirar.

Ya eran las nueve y cincuenta.

«Papá, papá, mamá viene a verte todos los días, ¿por qué no sonríes?» preguntó Moon al ver que León permanecía en silencio.

León forzó una sonrisa.

¿Adivinas por qué no sonrío?

En diez minutos, su enemiga jurada, con quien no había desarrollado sentimientos pero sí había criado a una hija, vendría a visitarlo.

¿Cómo podría sonreír?

León miró rápidamente alrededor de la habitación, buscando alguna grieta donde pudiera esconderse.

Pero ¿de dónde iba a salir una grieta en esta pequeña habitación infantil que pudiera albergar a un joven robusto de veinte años?

Miró la gran cama de la habitación, pensó un momento y se preguntó si debería seguir fingiendo estar muerto.

León pasó de las palabras a la acción y se lanzó a la cama como una carpa saltando al agua.

Moon no entendía por qué su padre, que acababa de despertar, quería volver a acostarse, así que corrió descalza hasta el borde de la cama y preguntó con curiosidad:

«Papá, ¿no vas a venir conmigo a ver a mamá?»

«Shh, cuando tu madre venga, dile que aún no he despertado.»

Moon se rascó la cabeza, «¿Por qué? ¡Mamá tiene muchas ganas de que despiertes!»

«Emm, porque… porque papá quiere darle una sorpresa a mamá, ¿entiendes?»

«¡Una sorpresa!»

Los ojos de la pequeña Moon brillaron, y el mechón blanco en su cabeza y la pequeña cola detrás de ella también se agitaron un poco.

«Sí, una sorpresa. Moon, tú también quieres que mamá reciba una sorpresa feliz, ¿verdad?»

«¡Sí~!»

«Entonces, cuando mamá entre, finge que no sabes nada, ¿de acuerdo?»

«¡Está bien! Moon hará todo lo que papá diga~»

Hay que admitir que León tenía bastante talento para engañar a los niños.

Después de acomodar a Moon, León cerró los ojos y volvió al estado en el que estaba acostado antes.

Unos diez minutos después, la puerta se abrió y el sonido de tacones altos golpeando suavemente el suelo se acercó cada vez más.

Rossweisse, digna de ser la reina de los dragones plateados, incluso con los ojos cerrados, León podía sentir el aura de autoridad que emanaba.

«Moon.»

«¡Sí, madre!»

Un tono muy alegre.

Rossweisse arqueó una ceja, «¿Por qué estás tan contenta?»

Dudando por medio segundo, Moon negó con la cabeza, «No, Moon no está contenta.»

Las pupilas de dragón de Rossweisse se movieron ligeramente mientras examinaba cuidadosamente el rostro tierno y adorable de su hija, que no podía ocultar sus pensamientos.

La pequeña estaba respondiendo muy seriamente a la pregunta de Rossweisse.

Esto no era inusual.

Pero parecía demasiado… seria.

Además, la cola de Moon se balanceaba de un lado a otro detrás de ella.

Los dragones solo mueven involuntariamente sus colas cuando están muy emocionados.

Normalmente, las dejan caer naturalmente sobre el suelo, como Rossweisse.

Rossweisse no siguió preguntando a su hija, simplemente movió lentamente su mirada hacia León, que yacía inconsciente en la cama.

Calculando los días, este tipo debería haber estado en coma durante dos años.

Ya debería estar cerca de despertar.

Rossweisse habló con su tono habitual, «Bien, ya veo. Ve a jugar.»

«Madre…»

«¿Hay algo más?»

«No, nada. Moon se va a jugar.»

«Bien, ten cuidado.»

Moon miró por última vez a su padre fingiendo dormir, y luego salió corriendo de la habitación.

Rossweisse caminó lentamente hacia la cabecera de la cama y se sentó elegantemente de lado.

Colocó su cola plateada casualmente sobre la cama, mirando a León «inconsciente».

No dijo nada, no hizo nada.

Después de un largo rato, la reina soltó una risita.

León escuchó claramente esa risa suave.

No sabía qué significaba.

¿Acaso había descubierto su farsa?

No había razón para ello, ¡su actuación era perfecta!

Los dedos de la otra mano de León se curvaron involuntariamente, apretando el puño.

Sabía muy bien lo que le había hecho a Rossweisse en el pasado, esta dragona debía odiarlo hasta los huesos.

Si no lo había matado mientras estaba en coma, era porque estaba esperando a que despertara para torturarlo lentamente.

León no iba a dejar que se saliera con la suya.

Si su actuación fallaba, lucharía directamente contra Rossweisse.

Entonces Rossweisse se quitó los tacones.

Cling clang—

Los tacones altos cayeron al suelo con un sonido claro.

Luego se oyó el roce de la ropa contra las sábanas.

El sonido hacía que uno se sintiera inquieto.

Al siguiente momento, un aroma fragante llegó desde su lado, rozando suavemente la cara de León.

Este olor le era muy familiar a León.

Era el último olor que había percibido antes de desmayarse en la celda.

Aunque en ese momento el aroma corporal de Rossweisse estaba cubierto por el olor a alcohol, León aún podía percibirlo vagamente.

¿Qué pretendía esta dragona acercándose tanto?

¿Matarlo en silencio?

Ja, pequeña dragona malvada, lo has pensado bien. Si haces mucho ruido, Moon podría oírte.

Ver una escena sangrienta así causaría un gran trauma psicológico a un niño.

León no se movió precipitadamente, esperando a ver qué pretendía hacer esta dragona.

Rossweisse extendió lentamente su dedo índice y pulgar, acercándolos poco a poco a la nariz y boca de León.

Luego—

Le pellizcó suavemente la nariz.

«Oh, olvidé la boca.»

Diciendo esto, la reina extendió su otra mano y cubrió la boca de León.

Sin embargo, esto no era para asfixiarlo hasta la muerte, él podía sentir claramente que Rossweisse controlaba cuidadosamente la fuerza.

Simplemente quería dificultar su respiración.

Si realmente quisiera asfixiarlo, le habría apretado directamente el cuello.

Parecía que Rossweisse estaba probando si había despertado.

León se esforzó por contener la respiración.

Solo tenía que superar esta prueba, y cuando Rossweisse se fuera, encontraría la manera de escapar de allí.

El tiempo pasaba segundo a segundo.

Rossweisse también tenía paciencia, simplemente se arrodilló junto a León, cubriendo su boca y nariz.

León también podía aguantar, sin que su cara se pusiera roja ni su corazón se acelerara.

Bromeas, este tipo es el matadragones más fuerte, aguantar la respiración bajo el agua durante veinte minutos no es ningún problema.

«Vaya~ Qué capacidad para aguantar la respiración.»

Dijo Rossweisse con tono juguetón.

León se sintió secretamente orgulloso, pero al siguiente momento, sintió una sensación cálida en su oído.

Rossweisse se inclinó hacia adelante, se acercó al oído de León y sopló suavemente aire caliente.

El aire húmedo y cálido se metió en el oído de León y luego se deslizó por su piel hasta el cuello de su ropa.

Era cosquilleante y hacía que uno se sintiera inquieto.

Al mismo tiempo, este aire caliente llevaba consigo el ligero aroma fresco de la boca de Rossweisse.

¿Es… es esta tu forma de poner a prueba a tus subordinados?

¿Qué subordinado podría resistir una prueba así?

Ja.

¡Dragona inmadura!

Sin embargo, esto no era todo lo que Rossweisse tenía preparado.

Al ver que soplar no tenía efecto, abrió ligeramente la boca y mordió con cuidado el cartílago de la oreja de León.

Había un ligero dolor, pero más que eso, era la estimulación física de una mujer.

León apretó fuertemente el puño del otro lado.

Sin embargo, ahora el puño apretado ya no era para prepararse para contraatacar en cualquier momento;

sino para reprimir sus impulsos primitivos.

Pequeña dragona malvada, ¿crees que con estos trucos puedes confundir al mejor cazador de dragones del imperio?

Ja.

¡Inmadura ×2!

«Oye, deja de fingir, ya se te ha levantado.»

«¡Estás mintiendo! ¿Dónde se me ha levantado? Yo no sé na—»

El ambiente se volvió repentinamente incómodo.

Rossweisse se arrodilló a un lado, mirando a León con los ojos entrecerrados y sonriendo, «Mira, ¿no se te ha levantado?»

Después de dos segundos de silencio mortal, León se levantó de un salto de la cama, alzando el puño y diciendo:

«Ya que me has descubierto, no tengo nada más que decir. Adelante, mátame o tortúrame como quieras, pero te advierto que me defenderé.»

Rossweisse se arregló el cabello, sin preocuparse en absoluto por la amenaza de León, «¿No quieres decir algo más, como disculparte por haberme violado hace dos años?»

» ¿Crees que yo quería hacer eso? Humanos y dragones son incompatibles, enemigos naturales. En circunstancias normales, preferiría morir antes que tocarte.»

Al oír esto, Rossweisse arqueó una ceja, «¿Estás diciendo que tocarme también fue una tortura para ti?»

«Por supuesto.»

«Ja, León Casmode.»

Los ojos de dragón de Rossweisse de repente se volvieron fríos y feroces, una clara señal de que un dragón está a punto de atacar.

Aunque el cuerpo de León aún estaba débil, estaba dispuesto a resistir hasta el final.

Sin embargo, justo cuando León se preparaba para contraatacar, la cola de Rossweisse de repente se enroscó alrededor de su tobillo y con un tirón lo hizo caer sobre la cama.

León estaba a punto de levantarse de nuevo, pero Rossweisse se puso de pie repentinamente, extendió sus largas y hermosas piernas, y colocó un pie de jade con precisión sobre su pecho.

«Qué… ¿qué vas a hacer…?»

«Vengarme, León Casmode. Lo que me hiciste hace dos años, ¡ahora te lo devolveré!»

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